En la actualidad ocho de cada diez abuelos venezolanos reciben su pensión. A pesar de la severa crisis económica mundial y la baja en los ingresos petroleros de la nación, la prioridad para el Gobierno Bolivariano ha sido garantizar la protección de las poblaciones más vulnerables, entre las que se encuentran los adultos mayores.
En 2015, el país registró un nuevo récord al aumentar a más de tres millones la cifra de pensionados, lo cual representa un crecimiento superior al 775% si se compara con las 397.000 personas que contaban con seguridad social en 1998.
El hecho de que el número de pensionados en los últimos 17 años se haya incrementado en casi ocho veces obedece a que la Revolución ha activado mecanismos que facilitan a los abuelos completar las cotizaciones o incluso recibir su asignación mensual aunque jamás haya figurado formalmente en el sistema de contribuciones del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), como es el caso de la Gran Misión en Amor Mayor, creada por el comandante Hugo Chávez en diciembre del 2011.
A través de este programa social los campesinos, amas de casa, cultores, artistas, artesanos, deportistas, choferes, taxistas y pescadores, entre otros, han podido formar parte del IVSS y cobrar mensualmente el monto asignado por pensión, alineada con el salario mínimo.
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